Slam Dunk [Reseña]

Slam Dunk es un shonen de deportes (concretamente, baloncesto) que consta de 31 tomos creados por Takehiko Inoue y que en 1993 comenzó su serialización en anime, recopilando al final 101 episodios más 4 películas. 

La historia comienza con Sakuragi, un macarra de instituto japonés de 15 años, que para ligarse a la chica que le gusta, decide apuntarse al club de baloncesto del instituto Shohoku, ya que a ella le parece genial que un chico juegue a algún deporte. No obstante, al poco se encuentra con su pasión por el baloncesto es mucho mayor y tendrá que enfrentarse a muchos retos, ya no solo por sus propios compañeros de equipo, sino también con otros jugadores, situaciones complicadas y sobre todo, con su carácter tan explosivo y directo, para de esa manera, llevar a su equipo a las nacionales.

Voy a hablar sobre los personajes principales.

Sakuragi Hanamichi


Protagonista de la serie. Va al instituto Shohoku, tiene 15 años y se presenta como un macarra  de los que no hay. Se enfrenta por cualquier cosa, contra cualquier persona, da igual que suceda. A él y su pandilla (de macarras restantes) no puedes tocarle las narices. Hasta que decide apuntarse al club de baloncesto para conquistar a Haruko. Tengo que decir, que me costó mucho cogerle el gusto total a este personaje, porque siempre haciendo bromas, era algo insoportable (era como la sensación que tenía con Naruto, que siempre me cansaba). No obstante, su progresión es la más notable y a pesar de que sigue haciendo muuuchas bromas (en verdad, me reía con muchas, sobre todo cuando llama "gordito" al profesor Anzai y le toca la papada), se pone muy serio y es capaz de analizar las situaciones de partido con experiencia. Además su nivel de autosuperación y fuerza, es lo que le hacen llegar a donde llega (y eso fue de lo que más me gustó). Su evolución en experiencia, sin duda es lo más notable y al final, emociona un montón ^^.

 Rukawa Kanae

También es jugador de primer año en el Shohoku (como Sakuragi). Pero es totalmente el opuesto al protagonista, comenzando por la experiencia en el juego. Rukawa es la estrella del equipo. Muy frío, analizador y porque no decirlo, sobrado (pero es que puede serlo!). Se consagra como enemigo total de Sakuragi, porque en apariencia nunca se soportan, aunque hacia el final su relación madura más y se van viendo algunos tintes de comprensión y apoyo (algunos solo, ¿eh?). A pesar de que al principio lo presentan como que no necesita superarse, no es así. Rukawa puede ser muy bueno, pero siempre habrá alguien mejor y hacia el final se encuentra con todos esos baches que al principio no encontraba, por lo que la superación de Rukawa también es muy notable y su progresión en el manga es distinta a la de Sakuragi: al principio no le cuesta nada ganar y al final sí (y mucho). P.D: su camiseta será para mí ^^.

Akagi Takenori

Es el capitán de tercer año del equipo de baloncesto. Es una mole con muy mala leche si no se participa en el entrenamiento como toca, pero pese a todo, él lo hace porque desea llegar a las nacionales que nunca ha podido alcanzar. Tiene muy buen corazón y se esfuerza muchísimo. Es muy bueno en el juego, aunque a veces, para el resto de equipo, su juego le parece predecible, no obstante, su evolución consistirá en eso, en aprender a ser impredecible y a atacar con más contundencia (sí, mucho más que al principio).

Miyagi Ryota

Jugador de segundo año, el más bajito y por tanto, el base del equipo. Está profundamente enamorado de Ayako (la mánager) y es tan cabezón y luchador como Sakuragi, por lo que al comienzo, chocan de inmediato, pero luego se hacen grandes amigos y se coordinan muy bien en el juego, confiando el uno en el otro. Miyagi es un ejemplo de valentía y fuerza, ya que pese a su altura (un condicionante que siempre está presente), es muy confiado en su propio juego y movimientos. Es de los que menos le cuesta recuperarse, después de haber fallado tanto, así que su nivel de autosuperación roza como el resto.

Mitsui Hisashi

Me encanta la historia de Mitsui. Es un poco spoiler (para los pocos que puede tener este manga, a parte de resolución de partidos), así que solo diré, que Mitsui es un personaje que al principio es muy inestable. Ha tenido un pasado referente al baloncesto, que le ha hecho cambiar en el presente y que en este presente, le volverá a hacer cambiar para volver al equipo. Me encanta. Es un as de los triples, pese a tener la rodilla mal. Basa su confianza en ello y en la fuerza y expectativas de pasado que lo rodean (aunque el pasado también es algo que a veces mina su confianza). Su nivel de autosuperación es igual que el resto, aunque como Sakuragi, tampoco conoce límites, llegando a la peligrosidad en algún partido.

A mí me ha encantado. Es una historia que engancha desde un comienzo, sobre todo por sus personajes (más allá también de lo que es el Shohoku, porque el manga tiene otros muchos de personajes carismáticos. Me encantó Sendoh), que se complementan entre sí, para hacerse evolucionar los unos a los otros. Mezcla comedia, algo de romance y deporte. Nunca he leído un manga de deportes, así que empezar con Slam fue una elección buenísima. Todo esta muy bien estructurado. Los partidos se reparten perfectamente entre los capítulos para conseguir: que te enteres de muchas jugadas, de todos los pensamientos de todos los jugadores de cada equipo, que veas una buena progresión de tiempo de partido y finalmente, que sufras con ellos. Confieso que leyendo en clase, me puse muuuy nerviosa la mayoría de veces y no sabía como ocultarlo frente al profesor (en fin xD). Sobre todo me gusta la fuerza y confianza que transmite: si te lo propones lo consigues. Tal vez, que el final se cortase así de pronto, no fue algo que me gustase, pero no por nada, sino porque quería más. Por supuesto, el final es previsible (y la verdad, preveí el resultado de todos los partidos que se han disputado en el manga xD), pero aún así, el sufrimiento de saber y no saber, siempre está ahí.

El dibujo, por supuesto, es una maravilla. Con corte realista, pero sin abandonar la línea cómica que presenta de una manera tan natural que encaja perfectamente. Takehiko sabe plasmar a la perfección todos los movimientos, líneas cinéticas, etc... para ver a la perfección como sería en movimiento el dibujo. Además, domina con maestría la composición del mismo manga: viñetas, planos... Es espectacular (yo he quedado maravillada por cada página, vamos). Por supuesto, Takehiko afirma haberse basado en fotografías de jugadores profesionales de la NBA americana, para inspirarse en sus dibujos, en como dibujar la ropa cuando el personaje está en movimiento, etc...

 En definitiva, recomiendo su lectura sí o sí, hayas o no leído un manga de deportes alguna vez en tu vida. Porque es un manga ameno y muy adictivo (yo me la leí en nada), que te introduce de manera natural y comodamente en el mundo del baloncesto, en la superación de los personajes... incluso en el aprendizaje de técnicas de juego. Es una obra imprescindible (y me da rabia no haberla disfrutado mucho antes) para cualquier tipo de público. 

Lo mejor: Dibujo, personajes, guión, composición. Todo, en definitiva. Es 100% imprescindible y recomendable.

Lo peor: Lo cierto es que, para ser el manga que es, no le encuentro nada negativo. Lo juro.