viernes, 24 de septiembre de 2010

Y en la noche comienza...

Existe ese pequeño pinchazo interno, intenso y no tiene porque ser doloroso, pero sí molesto. Te acecha, te susurra y te incita. Lo apartas con la mano, pero vuelve, porque él sabe que en realidad a ti te encanta que te ronde. Al final acabas haciéndole caso y te das cuenta de que eres tú buscándote a ti mismo dentro de un interminable bucle llamado vida.

Y todo empieza con nuestro insomnio personal, nuestra realidad interna que nunca descansa, que nunca duerme. Me he tomado la molestia de buscar el significado de la palabra insomnio en wikipedia: el insomnio es uno de los trastornos del sueño más com
unes. Y también más terroríficos, porque aborrecemos mirar el techo de nuestra habitación esperando que nuestra nana particular venga y nos suma en un profundo sueño. Pero no nos percatamos de que esa es la parte más divertida, donde creamos un espacio entre la realidad y la ficción.

Dicen que el insomnio es malo, que puede acarrear riesgos como la depresión, falta de atención, somnolencia diurna, mal humor, etc... No obstante, es el precio que hay que pagar para encontrar aquello que está más allá de ese pinchazo que abusa de nuestra conciencia.

Y aquí voy a plasmar eso. Mis idas y venidas del mundo del insomnio terminal.
¿Entras?
"Nada es permanente, ni la muerte"



1 comentario: